La Odisea de Ilusiones Traicionadas es un documental de este año que captura muy bien todo lo que Kundera fue dejando en breves y espaciadas entrevistas.
Praga no sería Praga sin Kundera, Paris no sería Paris sin Kundera, y Europa Central no habría recuperado su voz y su independencia sin Kundera. Todos tenemos una deuda con él.
Que locura de película es Extraction 2. Ese plano secuencia de 20 minutos con los cambios de ambiente parece un videojuego sobre rieles. Una maravilla de diseño.
Barbie es una delicia de peli. El momento en el que el personaje de Ryan Gosling se da cuenta de cómo funciona el mundo real es uno de los mejores giros que he visto en años. El diálogo con la vieja en la estación de bus es el corazón de esta película. La parodia de 2001 al comienzo y la crítica al mansplaining de El Padrino es un brillante 1-2 para ablandar a los críticos.
Los Niños de Brasil necesitaría un corte de 15 minutos y menos sobreactuación, pero qué bien hecha está. y qué buena idea para una novela y un guión sobre la raíz del mal. Curiosamente, Bruno Ganz tiene el papel encargado de explicar cómo traerán a Hitler de vuelta a la vida.
Ese momento en el que Jessica Harper, Bernadette Peters y Steve Martin aparecen disfrazados de marineros cantando Life Is Just a Bowl of Cherries es fantástico. No entiendo porqué no había visto Pennies from Heaven antes.
Me sorprendió lo buena y cercana que es Yo y Las Bestias. tuve amigos como esos, en los ismos predicamentos. El abismo que hay entre los sifrinos y el resto del mundo, vivir en casa de tus padres hasta que te mueras, esconder dólares dentro de un objeto en tu cuarto, todo me sonaba a una vida pasada. es el cine mío.
Vi el corte de 5 horas de Napoleon de Abel Gance y fue como un sueño febril, hay secuencias que no tengo idea de cómo se rodaron, otras que son prácticamente cuadros expresionistas. Me hizo pensar en los apologistas de Napoleón y su argumento de que fue uno de los primeros en pensar en la idea de una Europa unificada, la revolución universal, liberar a los pueblos europeos de las monarquías. Aunque hoy pueda parecer una noción algo loca, especialmente influenciada por la retórica revolucionaria de los últimos 70 años, en aquel entonces tenía sentido. Unificar a Europa bajo los ideales de la Ilustración. Una racionalización de guerras devastadoras que causaron la muerte de millones.
En fin, pueden verla por pedazos, dejarla corriendo en el fondo, no hay mucho diálogo que perderse. De hecho, así la vio Mónica, pasaba por detrás de mí, se quedaba viendo un rato, «ah, qué hermoso eso», y yo «qué sí, no tengo ni idea de cómo lo hicieron”.
También vi Waterloo por primera vez desde que la vi en SU cine millonario hará 40 años. La primera media hora es súper viril, una película hecha cuando los hombres eran hombres y les pegaban a las mujeres. La segunda hora y media es una eyaculación megalómana de Dino de Laurentis. Sergey Bondarchuk, el director soviético, a pesar de su pedigree épico, no pud con tantos millones. Es lenta cuando debe ser rápida y viceversa, trata de compensar con un exceso de tomas aéreas que hoy resultan triviales e innecesarias. También estoy contaminado de todo el cine de guerra de los últimos 40 años, que es muchísimo mejor que esta película.
La vi porque leí en algún artículo leí que era como la versión que uno debe ver en lugar de la Napoleón de Ridley Scott, pero no es.
Hace tiempo, Luis me habló sobre como ET es un vehículo de proselitismo cristiano. No recordaba que se moría y resucitaba al 3er minuto, como nuestro Señor. N no aguantó la pela cuando ET se empezó a enfermar y se fue. M estaba super angustiada.
También Luis: “La magia de esa película es la naturalidad de las escenas familiares. (…) Los carajitos piden pizza, se la pelean, joden entre ellos, esta todo desordenado. Está tan bien lograda que empatizas y luego te crees cualquier vaina.”
Sí, y está llena de artefactos (ahora históricos) que hace que todo parezca que hay gente que vive allí. 10/10 en set design.
Ahora entiendo también de donde vienen todos esos fanáticos de Trump y QAnon y la paranoia anti gubernamental… de bolas, tuvieron un trauma en la primera infancia.
Despedí el año viendo Willy Wonka y la Fábrica de Chocolates con M, como contexto para que Mónica la llevara al cine a ver Wonka. Sentí un logro especial cuando me di cuenta de que ella estaba descifrando toda la película, y un alivio tremendo al darme cuenta de que, luego de todos estos años, todavía se sostiene.