¡Por fin! Luego de una competencia que parecia haber sido creada para ellos, Brasil jugó contra un equipo de mediana categoria y perdió. Dada la superioridad hombre-a-hombre de sus figuras, imposible de imaginar, pero lógico si piensas que no es béisbol lo que están jugando. Claro, vale decir que Francia pasó de lo patético a lo sublime en dos semanas y que Zidane dio una clase magistral de fútbol, con humildad de esa que produce úlceras y un pase-gol incluido (un pase gol épico, para montarlo en un cuadro y rezarle todas las noches).
¿Joga Bonito? Si, claro…
Es un raro chance para las casualidades que el mundial haya estado desbalanceado en terminos de calidad futbolistica favoreciendo a Brasil. Que tengan que llegar a cuartos para enfrentarse a un equipo decente mientras que del otro lado, los mejores se eliminan entre ellos (como por ejemplo Alemania y Argentina). Pero así como está ‘la chance’, también está la verdad que no deja de sorprender luego de 6 (¿7? ¡Ya son siete, que horror!) mundiales: el fútbol es redondo, como la pelotica.