Esto no es exorcismo, es amor
De entrada, Inconsciente Colectivo, de Fabiana Cantilo, es una belleza.
Creo que cualquier persona que en su adolescencia haya seguido de cerca el rock argentino tuvo en algún momento que enamorarse de Fabiana Cantilo. Siempre asumí sin reservas que las coristas de esos genios debían ser, luego de los conciertos, portentosas amantes. Y quizás lo fueron. La Cantilo era la distinta, tenía la particularidad de ser una buena solista y además estaba rematada por un lunar.
Inconsciente colectivo es un album de covers de nombre explicativo. Grandes éxitos del rock argentino. Quizás su único pecado es que no hay riesgo en los arreglos. Pero también es verdad que el respeto a un original es el mejor halago. Hablando de eso, kudos por incluir esa brillante composición de Charly en modo Serú Girán, ‘Canción de Alicia en el País’. Grito de libertad + apología al tercer mundo + referencia literaria + Joni Mitchell + Queen. Por más que la que escuchado en estos días, no he podido sacarme las progresiones de la cabeza, así que lo único que me queda es escribir sobre ella. Exorcizarla.
Aunque A. está encantada con la inclusión de ‘Mary Poppins y el deshollinador’ y ‘Donde manda marinero’, yo soy más parcial a la versión de ‘Fue Amor’ (Tiene un guiño de papeles invertidos y todo: yo buscando el polvo de Dios / vos bebías para irte de aquí). Sin embargo, coincidimos en que la versión de ‘Prófugos’, de Soda, es excelente.
Los panas de Cabilla Musical están compartiendo el disco ilegalmente desde hace unos días.
Por cierto…
Ahi Vamos es el mejor disco de Soda desde Canción Animal (es decir, en 15 años). Que Canción Animal sea intocable y este sea un disco de Cerati es irrelevante, la comparación es justa.
Los que piensan que un retorno asi era inesperado, deben remitirse a How to Dismantle An Atomic Bomb, el disco de U2 de 2004. No sólo porque back to the roots sea el tema de los rockeros en sus 40s, sino porque así como hay quien asegura que la imposible longevidad y éxito de U2 se debe al paralelismo con las portadas de los Beatles, yo sostengo, por un asunto de zeitgeist, que algunos discos de U2 y Soda son complementarios entre ellos. Signos es a Unforgettable fire como Ruido Blanco es a Under a Blood Red Sky, Joshua Tree es a Doble Vida y Achtung Baby es a Canción Animal, como Zooropa es a Dynamo y Sueño Stereo es a Pop. Basta escuchar al que saque un disco primero, para ver con qué viene el otro.
torrent. Pero cómprenlo. Es kickass.
Contra todo pronóstico
Red Hot Chili Peppers es otra de esas bandas que ha podido mantenerse viva mas alla de su tiempo reglamentario y no tienen pinta de aflojar.
No recuerdo cuándo fue la última vez que escuché un disco malo de los Chili, pero sé que fue antes de 1992. El más reciente, Stadium Arcadium, una épica descarga de 2 horas y dos minutos, debutó en el número 1 de Billboard y se mantuvo allí durante unas cuantas semanas. Los Chili en tres décadas de carrera han conseguido convertirse en el parangón del rock comercial cantando sobre lo duro que es vivir en California, tierra de sol y mujeres. No deja de sorprender que esa mezcla de hedonismo, punk, hip-hop, metal y funk, haya sobrevivido tanto tiempo, considerando que dependen casi exclusivamente de sus shows en vivo, las acrobacias de Flea en el bajo y los abdominales de Kiedis, una singularidad del mundo del espectáculo que ha logrado una proeza sin par: ser una superestrella de la canción con un registro vocal patéticamente limitado. Kiedis no canta, habla. Y con todo y eso, es un tipo. Es energía pura.
Bang ba-ba-bang-go!
Los temas de Whatever People Say I Am, That’s What I’m Not tienen casi un año rodando. Arctic Monkeys es otra de esas bandas neopostpunk que han brotado como arroz en el Reino Unido. Lo que la diferencia de otras manifestaciones de energía pura como Bloc Party o Art Brut es que Alex Turner es un excelente narrador.
Los temas de Arctic Monkeys están llenos de reflexiones desechables, comentarios cínicos y construcciones complejas que paradójicamente funcionan de maravilla con esa interpretación acelerada que apenas deja tiempo para digerir. Cosas como esta: I said I bet that you look good on the dancefloor / Dancing to electro-pop like a robot from 1984 / From 1984! en seis segundos.
Hace tiempo O. me dijo que usaba ‘I bet that you look good on the dancefloor’ para empezar el día. No estoy solo en el mundo.
A-Joro Jara Joro
Gracias a O., he estado escuchando los grandes exitos de Fela Kuti, a.k.a. The Black President, a.k.a. lo que tiene más cerca Nigeria a una leyenda de la canción, un multi-instrumentista, un héroe, un liberador de mentes.
Prócer del Afrobeat, Kuti compuso quizás las mejores piezas de funk jamás creadas. Con una longitud épica, es dificil escucharlas sin romper en un baile espontáneo (ya me he sorprendido dos veces), la vibra que transmiten es… subversiva. Por eso y otras razones que pueden leer en Wikipedia (es en), le cayeron encima.
Con respecto al ejército nigeriano,
Zombie no go go, unless you tell am to go
Zombie no go stop, unless you tell am to stop
Zombie no go turn, unless you tell am to turn
Zombie no go think, unless you tell am to think
(nota mental: El Afrobeat es la Salsa Brava de África)
Por un asunto de reverencia y exorcismo, debo decir que esos metales de Zombie, así cuadraítos, deben estar allá arriba a la derecha del padre.