afinidades electivas

Steve Jobs 1955 – 2011

imagen: foundry @ mint digital

El resultado del trabajo de la gente en Apple influenció mi vida más que cualquier otra cosa. Nada de lo que hago durante el día sería igual si Wozniak no hubiese diseñado la Apple II, ni Jobs la hubiese vendido. Inclusive en el supuesto de que a alguien se le hubiese ocurrido licenciar el GUI de la Xerox Alto, todavía tendríamos el problema de la tipografía.

Mi trabajo es básicamente hacer algo nuevo todos los días. El empuje para hacer eso lo obtuve 50% de mi padre y 50% de la historia que venía impresa al final de todos los manuales de Apple durante los 80s. La épica de los dos Steves ha sido el how-to de todos los empresarios de tecnología de los últimos 40 años.

(si nunca has visto esos manuales, aquí hay algo. Nunca antes y nunca más se hicieron manuales así)

Aprendí Logo en una Apple IIe y me enseñé pascal en una //c (Instant Pascal de alguna forma me acercaba a la interfaz gráfica del Macintosh). Terminé siendo programador porque Steve Jobs alguna vez pensó que los computadores deberían ser asequibles. Francamente, con mi set de habilidades y con lo mal que se me da la ingeniería, no se qué otra cosa podría hacer hoy.

Más allá de las herramientas y los productos, está la inspiración. Steve Jobs no se andaba con rodeos y tenía una legendaria actitud en contra de perder el tiempo. Dependiendo del día, podía estar a favor o en contra de sus maneras. Pero luego de una década tan prolífica, me harán falta esas dosis de ingenio y cojones.

En el resto de la web puedes leer elogios hermosos. Como por ejemplo, este de John Gruber, sobre los zapatos manchados de Jobs justo antes de su última aparición pública:

I like to think that in the run-up to his final keynote, Steve made time for a long, peaceful walk. Somewhere beautiful, where there are no footpaths and the grass grows thick. Hand-in-hand with his wife and family, the sun warm on their backs, smiles on their faces, love in their hearts, at peace with their fate.

Creo que es un buen momento de volver a ver Pirates of Silicon Valley. La he conseguido en veoh y en cuevana (lamentablemente, sólo la versión recortada en formato de película).

Como celebración de su trabajo, también es bueno ver la presentación del iPhone nuevamente. Steve Jobs haciendo una de las mejores presentaciones de su vida. Hoy en día nos parece natural, pero en 2007 nadie podía imaginarse un producto así.

También, me gustaría vincular nuevamente este video, que de todos es mi favorito. «El computador es una bicicleta para la mente» me ha acompañado como un mantra durante una buena parte de mi vida y es una suerte para todos que hoy esté en YouTube:

 

 

 

Salir de la versión móvil