Hubo un show, a los comienzos de Rage, en Pinkpop en Holanda. Durante «Killing in the Name» el público registró un 1.1 en la escala de Ritchter -lo reportaron en el periódico al día siguiente. Y ¿sabes? Como el sonido viaja más lento que la luz, cuando sonaba el redoblante, la gente lo escuchaba en diferentes momentos, a medida que el sonido se movía hacia atrás; así que el público brincaba en ondulaciones, y desde el escenario parecía un océano humano.
-Tom Morello, sobre los conciertos al aire libre. SPIN. Mayo 2007.