Todo drama o comedia romántica tiene al menos uno. Pueden ser la génesis de momentos referenciales, antológicos. Detalles, sacrificios, concesiones y, por la naturaleza del ser humano, castigos. Gestos poéticos.
Atención: muchos de estos videos muestran el final de las películas en cuestión. Les recomiendo que no se saboteen la vida y no presionen play si no han visto la película.
20. Once
Glen Hansard confía más en el talento de Markéta Irglová que en la posibilidad de que ella renuncie al imbécil de su marido. Antes de irse –y a pesar de que ella lo ha plantado en su despedida– usa parte de su dinero para enviarle el piano que ella tocaba regularmente en una tienda.
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19. Bram Stoker’s Dracula
Luego de que Gary Oldman le confiesa su verdadera identidad, Winona Ryder renuncia a todos sus prejuicios, todas las condiciones de su vida victoriana, y se entrega pidiéndole «¡sácame de toda esta muerte!».
Link, requiere confirmación.
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18. Roman Holiday
Al terminar la rueda de prensa, Gregory Peck le hace entender a Audrey Hepburn que su secreto está seguro y que las fotos que le darían fama y fortuna son, en cambio, un recuerdo de su paseo por Roma.
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17. The Story of Us
Michelle Pfeiffer elige comer en Chow Funs, concede su última resistencia y se lanza un monólogo bestial que repasa las razones de por qué la gente a veces decide salvar su matrimonio.
(…)
Digo Chow Funs porque somos un nosotros. Hay una historia aquí, y las historias no suceden de la noche a la mañana. En Mesopotamia o la Antigua Troya hay ciudades construidas sobre ciudades, pero yo no quiero otra ciudad, me gusta esta ciudad. Sé el humor en el que estás cuando te despiertas según cuál ceja esté más elevada, y tú sabes que soy más callada en la mañana y compensas, esa es una danza que se perfecciona con el tiempo. Y es difícil, es más difícil que lo que yo pensaba, pero hay más bien que mal ¡y simplemente no te rindes!
(…)
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16. The Apartment
Reconocer al amor verdadero y precipitarse hacia él sin reparos, es un gesto poético por excelencia. Esa carrera final ocurre en Jerry Maguire, en Four Weddings and a Funeral, en The Graduate y –notablemente– en When Harry Met Sally. Sin embargo, quizás ninguna de esas escenas es tan poderosa (o en todo caso, primigenia) como la ejecutada por Shirley MacLaine cuando se da cuenta de que merece ser mejor tratada y corre al apartamento de Jack Lemmon.
Comienzan un juego de gin. «La amo, señorita Kubalick, ¿me ha escuchado? la adoro absolutamente», dice el. «Cállate y reparte», dice ella.
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15. The Way We Were
Años después de su última separación, Barbra Streisand y Robert Redford se encuentran de nuevo en la calle. En un instante, mientras se ponen al día, ella le aparta el cabello con un ademán cotidiano que termina en uno de los grandes abrazos del cine.
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14. Amelie
Audrey Tautou descubre la solución del enigma que atormenta a Mathieu Kassovitz y monta el escenario para que él mismo descubra al hombre del fotomatón.
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13. Punch Drunk Love
Al borde de un colapso nervioso y consciente de que debe resolver sus problemas para poder amar libremente, Adam Sandler, en su versión más neurótica, dulce, rabiosa y aterrorizante, confronta a la suma de todos sus miedos, personificada por Phillip Seymour Hoffman:
Así que dime que lo dejamos hasta aquí antes de que te rompa el alma. Tengo tanta fuerza dentro de mi que no tienes idea. Tengo un amor en mi vida. Me hace más fuerte que cualquier cosa que puedas imaginarte. Yo diría que lo dejamos hasta aquí, Hombre del Colchón.
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12. Always
El fantasma de Richard Dreyfuss tiene la oportunidad de quedarse con su amada cuando el avión de Holly Hunter se estrella. Sin embargo, la deja ir, le regala el resto de su vida.
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11. Good Bye Lenin!
Daniel Brühl prolonga la vida de la RDA para evitar que su madre socialista, recién salida de un coma y frágil de salud, sufra una recaída.
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10. Il Postino
Massimo Troisi graba los sonidos de su isla con la intención de enviárselos a Neruda, de recordarle que están vivos y bien. En el proceso, descubre el significado del amor por su tierra… y la poesía.
(gracias A.)
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9. Elizabethtown
Kristen Dunst y Orlando Bloom se conocen mientras éste, luego de un estrepitoso fracaso laboral, va a reencontrarse con su familia para el funeral de su padre. Se enamoran, él confiesa que –dadas las circunstancias– no está listo. Ella premonitoriamente le ha preparado un cuaderno con indicaciones muy precisas y unos CDs. Un road trip para pensar sobre el amor, el trabajo, el futuro, y despedirse de las cenizas de su padre.
(gracias S.)
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8. Mary Shelley’s Frankenstein
En venganza por no haberle conseguido una compañera, De Niro ataca a Helena Bonham Carter en su noche de bodas. Ha podido destruirle el rostro, sacarle las tripas, pero no. Le arranca el corazón. El lugar donde se aloja esa materia imprecisa, el tesoro más preciado del Dr. Frankenstein.
(gracias A.)
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7. Say Anything
La carrera de Cameron Crowe está llena de momentos impecablemente musicalizados. El primero, y quizás uno de los más icónicos, ocurre cuando John Cusack –en la escena que lo inscribió en la historia del cine– levanta un reproductor sobre su cabeza y frente a la ventana de su princesa atrapada en el castillo, hace sonar In Your Eyes, la canción que escucharon cuando hicieron el amor por primera vez.
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6. Billy Elliot
Gary Lewis rompe la huelga de mineros (y varias capas de orgullo y homofobia) para mandar a Billy a la escuela de ballet. Cuando su hijo mayor lo confronta desilusionado y lleno de rabia, acepta la ignorancia de ambos y esgrime un argumento demoledor:
Para lo que sabemos podría ser un maldito genio.
¡Vamos a darle al muchacho una maldita oportunidad!
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5. Before Sunset
Luego de hora y media redescubriéndose y coqueteando por Paris, sabiendo que la despedida se acerca, Julie Delpy le regala a Ethan Hawke una canción basada en su primer encuentro. Lo mira a los ojos cuando canta «Una sola noche contigo, Jessie, vale por mil con cualquiera» y derriba la última pared.
(por cierto, durante ese primer encuentro, ambos protagonizan, dentro de una cabina en una discotienda, una de mis escenas favoritas de toda la vida)
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4. Nuovo Cinema Paradiso
Antes de morir, Philippe Noiret arma para Salvatore, su amigo y protegido, un montaje de todos los besos que tuvieron que censurar cuando ambos trabajaban en el Cinema Paradiso.
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3. Havana
Robert Redford, un jugador de póquer profesional, se retira de lo que sería una de las partidas de su vida y se extirpa un diamante que lleva bajo la piel de su antebrazo para pagar por la liberación de Raúl Juliá, el marido de la mujer que ama: una hermosa e intrigante revolucionaria interpretada por Lena Olin.
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2. La vita è bella
Para salvar la inocencia de su hijo, Roberto Begnini convierte los horrores de un campo de concentración Nazi en un divertido juego cuyo premio final es un tanque de guerra.
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1. Casablanca
Bajo la lluvia en la pista de un aeropuerto, luego de arriesgar su vida por salvar al esposo de la mujer que ama, Bogart inaugura impecablemente el más difícil de los gestos, la más grande cortesía.
Si bien la resolución es lógica (es imposible odiar a Víctor Lazlo), también es cierto que los ojos de la Bergman no mienten. Ilsa amará por siempre a Rick y a pesar de eso, Bogart nos arruina la vida a los egoístas, los esclavos de lo inmediato, los que pretendíamos ser poetas, los que queríamos decir lo indicado en el momento preciso:
No soy bueno siendo noble, pero no hace falta mucho para darse cuenta de que los problemas de tres personas no valen nada en este mundo loco. Algún día entenderás eso. Vamos, vamos… brindo por ti, pequeña