Durante el verano de 2004, unos estudiantes de NYU con mucho tiempo en sus manos crearon PacManhattan. Básicamente se disfrazaron de los personajes del popular videojuego y corrieron por las cuadras adyacentes a Washington Park en Nueva York, conectados vía celular a un centro de control que rastreaba todos sus movimientos.
Según tengo entendido, fue uno de los primeros crossovers de videojuegos al mundo real. Hay tres elementos de PacManhattan que llaman la atención:
1. Sus autores son anónimos.
2. No era excluyente. En la página web proporcionan las herramientas para crear versiones locales del juego.
3. Es obvio que el propósito no era sólo divertirse. Había una clara intención de experimentar con las reacciones que generaría ese acto de apropiación de la calle. Era un acto de ciudadanía, como dice por ahí un amigo.
Casi segundos después, unos científicos en Singapur crearon Human PacMan, un experimento de lo que ellos llaman «realidad aumentada», que consiste en equipar al jugador con lentes de 3D que permiten superponer las proverbiales pastillas en el mundo real.