Tres hermosas mujeres circulan por el parque y por fortuna, una de ellas es mi joven esposa. Veinticinco grados centígrados en una tarde de septiembre. Hace sol. Caracas queda en el infierno, pero no es la capital.
Tres hermosas mujeres circulan por el parque y por fortuna, una de ellas es mi joven esposa. Veinticinco grados centígrados en una tarde de septiembre. Hace sol. Caracas queda en el infierno, pero no es la capital.