Desde el piso trece, chamo

a L y G. Por transmutar anécdotas en posts sobre Caracas, a miles de kilómetros de distancia. Llegué a la planta baja del anexo del Hospital de Clínicas Caracas, vi hacia el norte y allí, casi encima de la Quinta Anauco, estaba El Cerro y su familiar alboroto de cúmulos verdes, recortado contra un desoladoramente […]

Centro, ciudad

A Roberto, por esa brillante estampa que le regalaste a la ciudad, Ana y Eduardo: su árbol sigue en pie luego de quince años, Plácido, accidentado Baudelaire en Maiquetía y la Taberna Escondida. Lo único que sobrevive de la Caracas en la que nací, es el CCCT. Aunque algunas tiendas hayan cambiado, en esa ciudad […]